Mucho se ha publicado y debatido acerca la deuda pública del gobierno del estado( obligaciones financieras como también quieren llamarle a tales pasivos gubernamentales), y corren distintas versiones, con frecuencia tergiversadas por interés político, acerca de su monto y peso sobre las finanzas públicas.
No por casualidad fueron tema central en las pasadas campañas electorales de los partidos de oposición al gobierno, no obstante que sus representantes en el congreso, en su momento participaron en la aprobación de las operaciones financieras, luego criticadas; igualmente, en otro ámbito del debate político los niveles de endeudamiento de las entidades federativas son manejados para presionar a los estados aceptar mayores controles del gasto, incluida la supervisión o para negociar los presupuestos de ingresos y egresos. Siempre es rentable en la polémica política, acusar al otro de hipotecar el patrimonio futuro de la población.
Por ello, es conveniente despejar los sesgos partidistas y electoreros en los enfoques y en todo caso, retomar una discusión critica de las finanzas públicas del estado a partir de datos confiables; la información pública permite establecer parámetros para juzgar con realismo y objetividad la situación de las obligaciones financieras o deuda del estado.
En ese sentido son importantes los datos que elabora la propia secretaria de hacienda y crédito público a través de su unidad de coordinación con entidades federativas; entre estos se pueden consultar los relativos a las obligaciones financieras de estados y municipios, el detalle del registro y los indicadores de porcentaje que representan sobre las participaciones en impuestos federales, uno de los principales rubros de ingresos de esas entidades públicas.
Por un lado, son una fuente confiable, ya que los compromisos de pago suscritos por las entidades federativas, son inscritos en el registro de deuda de la propia secretaria, y por el otro, dicha secretaria cuenta con la información sobre los importes en dinero de las participaciones en impuestos federales que efectivamente reciben las entidades; además de que por disposición legal, estas participaciones son garantía de pago en los créditos u obligaciones contraídas.
No menos importante es la agrupación de los datos del conjunto de las entidades federativas. Las tablas de información financiera de los entidades permiten la comparación si no entre iguales, entre similares, y ubicar a cada uno de ellos, en este caso, al estado de Veracruz, en el contexto de las administraciones estatales. Esto proporciona un marco no parcializado, los gobiernos estatales carecen de la influencia para falsear datos y, esa dependencia federal, de no ser correctos los datos, sería objetada.
¿ cuanto se debe ?
Los informes citados de la secretaria de Hacienda registra como obligaciones financieras del estado de Veracruz y sus municipios un monto total de 9 mil 307.4 millones de pesos a mayo pasado. Ni de lejos los 50 mil millones o hasta más que señalaban en sus mítines electorales los dos candidatos de la oposición. Los datos del monto, coinciden con los presentados por el secretario de finanzas y planeación del estado en comparecencia ante el congreso local en diciembre pasado, con motivo de la glosa del V informe del gobernador. Entonces Salvador Sanchez refirió que “ de conformidad con la SHCP, las obligaciones financieras de Veracruz- misma que precisó no eran deuda pública directa - ascienden a 9 261.4 millones de pesos”.
La distribución es como sigue: 6 mil 866 mdp, de la bursatilización estatal del 80% del impuesto sobre tenencia vehicular; 1 mil 305 mdp, a la bursatilización municipal del 20% del impuesto anterior. 521.7 mdp, diversos créditos municipales otorgados por Banobras, sin el aval del gobierno del estado. 567.1 mdp correspondientes a los créditos municipales también financiados por Banobras con cargo al Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social Municipal (FAIS).
Las obligaciones financieras del gobierno del estado, son estrictamente 6 mil 866 mdp, lo relativo a la bursatilización del 80% de la tenencia vehicular.
El uso de los fondos de la bursatilización son de todos conocido. este tipo de operaciones fueron expuestas reiteradamente en múltiples foros, y aprobadas por el congreso local, como una fórmula para adelantar recursos y ejecutar en el presente obras públicas indispensables. La del estado, se aplicó para saldar los créditos heredados por la administración anterior, 3 mil 500 millones de pesos, y el resto para financiar proyectos de obras prioritarias; en su momento se etiquetaron los recursos y en su aplicación participaron los diputados locales de todos los partidos políticos. Similar fue la disposición de los fondos de los 199 municipios, aunque no ha sido tan clara la forma de su aplicación, así como de la aportación que otorgó el estado en aquel programa denominado “ peso a peso”.
El registro global de la SHCP, que incluye al estado y sus municipios, determinó el monto en 9 mil 307. 4 millones de pesos. Esta cifra no representa una gravosa carga para las finanzas del estado. De acuerdo con los indicadores de la SHCP corresponden a 35.9% de los ingresos por participaciones. Por otro lado, la fuente de pago, por ahora de los adeudos de las dos operaciones de bursatilización del impuesto sobre tenencia vehicular, es la misma recaudación afectada en un fideicomiso. la derogación de la tenencia prevista para enero 2011 cambiará la fuente de pago, pero ese es otro cantar, para el futuro de corto plazo.
tabla de posiciones
Contra las especulaciones y versiones politizadas, la situación de la deuda u obligaciones financieras del estado de Veracruz es manejable. Conforme al indicador obligaciones / participaciones de la secretaría de hacienda es de los 10 estados mas solventes; la media es de 61%; hay estados, como Nuevo León, cuya deuda es de 29 mil mdp, representa el 139% de sus participaciones, el distrito federal debe 49 mil mdp, (92.4%), Jalisco,adeuda 21mdp, ( 78.2%) o el estado de Mexico, 32 mil 862, (62.1%).
Entre los estados con mayor peso de sus obligaciones financieras, Veracruz, estaría en el lugar 24.
Hace poco una nota de un periódico del DF especializado en temas económicos, metió en el mismo saco a Veracruz con Nuevo León, ambos presentados como ejemplos de la crisis de deuda de las entidades federativas, advirtiendo que estarían en riesgo de caer en moratoria. Obviamente no son comparables en su situación financiera, aunque se entiende el sentido de la nota, cuando se descubre que la fuente de información era un político neoleonés senador por el PAN,l derrotado en la lucha por la gubernatura en 2009. El blanco era el gobernador de su estado, y para reforzar, apuntó a Veracruz.
La deuda como el león, no es como la pintan.
fotografía y liquidez
Otra historia de desenlace aun pendiente, es el agudo problema de falta de liquidez que ha venido arrastrando el gobierno del estado. El año pasado, las finanzas estatales no salieron ilesas de la depresión mundial y sus repercusiones en los ingresos públicos nacionales( crecimiento negativo, caída de producción y precios de petróleo y en general de ingresos tributarios, y por consiguiente en las participaciones al estado y los municipios. En agosto del año anterior se reconoció un desequilibrio financiero por un monto de 6 mil 8 37 millones de pesos, déficit que sería cubierto con una nueva operación para bursatilizar una fracción de las participaciones federales, la cual no se concretó, entre otras razones, dicen que por el proceso electoral extendido en todas sus fases hasta el pasado 26 de octubre, fecha en que el TRIFE, en última instancia confirmó a Javier Duarte de Ochoa como gobernador electo de Veracruz. Y para rematar el estado padeció en los recientes meses la mayor de sus catástrofes naturales, huracanes y secuelas de lluvias e inundaciones, en mas de 100 ayuntamientos, que pusieron al estado en la necesidad de disponer de todos sus recursos para atender la situación de emergencia. En paralelo, fue aprobado un crédito por 10 mil millones de pesos para la reconstrucción, tampoco ejercido.
En su último mes de gobierno Fidel Herrera requiere destrabar el problema de liquidez; una vez que se ha dado ya la certidumbre política, las instituciones del sistema financiero nacional no tienen objeciones. Tiene que capotear ese toro, antes del 15, fecha en que acudirá al congreso local a entregar su VI y último informe. ¡ Suerte matador!
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